"El decoro burgués, basado en la dedicación al trabajo, en la rectitud y en el prestigio social, era una representación en la que se creía con pasión" dice Claudio Magris en un artículo de 1982 sobre Thomas Mann. Según el escritor de Trieste, en su obra maestra " Los Buddenbrook" publicada en 1901, Mann retrata a la burguesía que el conoció, inspirada en las corporaciones medievales y la ética del beneficio. Para Magris, cuando Mann escribía los Buddenbrook la fortuna comercial de su familia había acabado, y con ella la vieja burguesía, humanista y universal suplantada por otra, rica pero tosca y agresiva.